Hace un par de meses recibí una noticia devastadora…
Estando mi mujer embarazada, se decidió tras darle muchas vueltas en ese pozo de inmundicia y descerebrados que es el foro friki, el nombre que tendría mi niño. El por qué elegimos el que elegimos está claro, ¿no?
Primer día de clase. La profe jamona con gafitas y minifalda pregunta: “¿Cómo os llamáis?”
- “Yo Jaimito”, dice el cabrón obeso sentado en la primera fila.
“Yo Juanito”, dice el macarra de la camisa sucia con el dedo metido en la nariz.
“Yo Jorgito”, dice el pringao que ya se ha llevado tres collejas.
“Y yo… (diría mi churumbel con voz ominosa) ¡Magneto!”
Oooooohhh… ¡eso es un nombre, coñoya…!
A ver, asquerosos lectores… ¿quién va a ser el puto amo de esa clase? ¿Quién subyugará a todos los alumnos y los guiará por la senda que estime más oportuna? ¿Ese nenaza de Juanito? ¡Amos, anda ya…! ¡Está claro que mi Magneto, sin duda! Con un nombre así, la cosa no puede fallar… Ese nombre le convertiría en el líder natural de la clase, una leyenda en el colegio, a la par que haría que su maciza profesora se viera irremediablemente atraída por su musculoso padre.
But I digress… porque ya os digo que recibí una noticia demoledora.
¡Viene una niña! ¡No hay pene, por más que mire!
Con lo cual todo el plan de dominación escolar se me fue al garete. Ya no tendría un hijo friki al que moldear a imagen y semejanza de su prototípico y pluscuamperfecto padre. Se acabó el plan para tener en casa al nuevo Pacheco, o al futuro base del Unicaja… porque sí, Ann Nocenti no estaba mal, y la chiquilla puede jugar al tenis, pero reconozcámoslo, ¿qué probabilidades hay de que me salga una hija lectora de cómics? ¿Qué porcentaje de tías veis en las librerías especializadas que no vayan acompañando a los novios? Y si eliminamos los tebeos japos de la ecuación con nombres tan atractivos como “Somos chicos de menta”, o asín, el número se aproxima bastante a épsilon o a cero peloto, a nasti de plasti.
Sí… los compañeros del frikiforo trataron de animarme en tan amargo trance… “¡Llámala Elektra!”, me decían… “¡Emma es un buen nombre!”, pero nada lograba animarme.
Y entonces me dije: eres un paleto y un maldito neandertal (lo que es una novedad. Nadie me llama paleto o neandertal y sigue con vida para contarlo.) Que sea chica no significa que no vayan a gustarle el baloncesto o los cómics.
Y aquí, malditos lectores, es donde se plantea la pregunta del día…: ¿Querríais que vuestra niña, vuestra pequeña, fuese una lectora de tebeos?
Sí… ya os veo a todos diciendo “Pues claro”.
Pero qué pringaos.
Pensadlo un momento.
¿O es que no tenéis seso suficiente como para analizar un poco qué tipo gentuza se junta en una librería especializada? ¿Qué coño iba a hacer mi pequeña, mi hermosa hijita, rodeada de frikis purulentos babeando en su escote en una apestosa tienda de cómics?
"Mi pequeña pensando si acudir o no a la tienda de cómics"
Y lo que es peor… si mi hija saliera lectora de tebeos, cosa probable porque lo lleva en los genes, podría presentarse un día en casa con… ¡alguien como vosotros!
¡Que todos los dioses me asistan!
¡Mi hija saliendo con un pintas que viste camisetas ridículas que le marcan los michelines como a la Mole! ¡Con un tío con el careto lleno de granos, pero que se mira al espejo y ve a Tony Stark! ¡Con un bobochorra que no la puede ni invitar a un helado porque acaba de gastarse lo poco que gana en el Eros y el Kiss del mes! ¡Que para decirle algo bonito recurrirá a comparaciones con las obras de Taylor, Altuna, Hughes…! ¡¡¡¡HASTA PUEDE SALIR CON EL HIJO SECRETO DE KIMOTA!!!! (que, para ese entonces, tendrá la misma edad mental de mi hija…)
Sí… ya imagino la escena de mi niña entrando en casa sonriente comentándole a su amiga que su novio dice que se parece a una tal Miel de Manara... y mi cerebro dándome ordenes contradictorias... matar, mutilar, desmembrar... Gizzo Fyital, ¿qué hago? ¿Mato a ese cabrón? ¿Le arranco los ojos y me meo en sus vacías cuencas para que deje de sobar a mi pequeña? ¿Le aplico la inquisición friki con arrancamiento vía alicates de escroto y pezones?
No sé… aún queda tiempo, en cualquier caso, para que llegue ese día… pero os aviso:
¡¡ESTARÉ VIGILANDO, MAMONES!!
"Mi pobre niña saliendo de la tienda de cómics"
P.D.: Este post no pretende ser sexista, o en todo caso le da igual. La comunidad de redactores de este infecto foro agradecería que alguna lectora de cómics nos demostrara lo absurdo de nuestros puntos de vista y se agregase al mismo, pero por lo visto va a ser que no... que vamos a tener razón... ¡Una pena!
